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viernes, 29 de enero de 2010

PANAMÁ NO DEBE ENTRAR EN GUERRA CON LAS FARC

Este tema es de tan alta importancia que consideré escribir sobre el mismo en el instante en el que vi la noticia sobre el conflicto armado entre nuestro Servicio de Fronteras y presuntos guerrilleros colombianos. Sin embargo, la voz de la razón me indicó prudencia para esperar más datos y las versiones de las partes.

Lamentablemente, todo lo que he escuchado y leído desde entonces sólo ha servido para confirmar y afianzar mis peores temores. Pareciera que, ya sea por error o conscientemente, nuestras autoridades nos han involucrado de manera directa en un conflicto que no es nuestro y que todas las administraciones anteriores a lo largo de nuestra historia republicana habían tenido el sabio cuidado de evitar.

Cuando fui Director de la Policía Nacional el Servicio de Fronteras estaba bajo mi mando, por lo que me correspondía tratar con el señor Presidente de la República todo lo relacionado al accionar de las fuerzas de seguridad panameñas en la frontera con Colombia. Por esa razón conozco de los enormes esfuerzos que de manera prudente se realizaron, con éxito, para mantener una relación cordial y de cooperación con el vecino país , sin que ello implicara quedar envueltos en su conflicto armado.

Sucede que los países no tienen amigos, sino intereses. Por ello, desde que la guerrilla existe Colombia ha intentado, por todos los medios que ha considerado conducentes, que Panamá sea parte de su guerra. En la práctica eso significa que nosotros persigamos a los guerrilleros y que los ataquemos junto con el ejército colombiano, lo que a su vez nos convierte en blanco potencial de todas sus ofensivas.

Siendo esta práctica muy perjudicial para la seguridad de nuestro país, todos los gobiernos anteriores al actual han comunicado a Colombia de manera directa, con hechos y con palabras que sólo nos dedicaríamos a cuidar la integridad territorial y la soberanía de Panamá


En el campo, eso se traduce en que nuestras unidades de fronteras, por lo menos hasta el gobierno anterior, tenían la orden expresa de no disparar a los guerrilleros a menos que fuese en defensa propia o para defender a ciudadanos o poblaciones panameñas que hubiesen sido atacados. Si una patrulla nuestra encontraba a una de las FARC o a cualquier otra persona no nacional dentro de nuestro territorio debía primero conminarle a salir de Panamá y regresa a suelo colombiano, cosa que sucedía así en la gran mayoría de las ocasiones, sin que hubiese víctimas de ningún tipo.

Es por ello que llama la atención el hecho de que nuestras unidades hayan intercambiado disparos con presuntos guerrilleros y que además hayan matado a tres de ellos. Esto no parece casual y a mi me indica que pudiese haberse dado un cambio en nuestra política hacia ese conflicto, lo que originó otro tipo de ordenes para nuestros policías. Esta tesis se refuerza con todos los pronunciamientos públicos de los más altos funcionarios colombianos, incluyendo al Presidente Uribe, quienes han dicho que se trató de una operación conjunta, específicamente un bombardeo y que por ello felicitan a Panamá.

Ojalá que el Presidente Uribe, sus ministros y personal militar y policial estén mintiendo, pues si lo que dicen es cierto, Panamá lo pagará con vidas inocentes y posiblemente no sólo en Darién.

En el concierto de las naciones Panamá siempre ha guardado una posición objetiva y neutral, manteniendo relaciones cordiales con todo el mundo y sin comprometerse ideológicamente con ningún extremo. Espero que este siga siendo nuestro norte. Jugar a los buenos y los malos le sale muy caro a naciones tan pequeñas y vulnerables como la nuestra, si no me creen, pregunten a los que no podrán recuperar su vista sólo porque ahora no nos gustan los doctores cubanos.

QUE ESTÉN BIEN!!


CUALQUIERA PUEDE SER RICHIE TRAAD

Hace ya algunos días vi en las noticias que Richie Traad fue absuelto y en consecuencia salió de la cárcel después de casi tres años de detención preventiva. Me hubiese gustado escribir sobre esto antes, pero todos los días pasa tanto en Panamá que se hace difícil establecer prioridades. El caso de Traad me ha hecho pensar en todas las personas que hoy están en su misma situación y en todos los que pareciera que estarán así en el futuro cercano.


No se trata de defender a nadie en particular, lo importante es observar lo que ya hemos hecho para evitar repetir errores en el futuro.

Tengo algún conocimiento, aunque limitado, de este caso y ello me lleva a sacar ciertas conclusiones, las cuales aclaro que son meramente especulativas pues no las puedo probar.

Creo que el caso Traat es muestra de dos situaciones:

  1. Por la intención de condenar a una persona por hechos que no se le pueden probar, se le acusa de cualquier otra cosa que se cree más fácil de demostrar o sabiendo que el resultado será de absolución, se le acusa de todos modos para que los rigores del proceso penal se constituyan en la pena que el actor intelectual de la trama considera que el acusado debe cumplir a toda costa.
  2. Los fiscales y jueces aplican, sin ningún tipo de apego a la ley, la medida cautelar más grave, es decir, la detención preventiva, la cual se constituye de ese modo en una especie de pena, aunque el acusado finalmente sea absuelto.

Es evidente que si mis especulaciones terminan siendo fundamentadas, todos los ciudadanos de este país corremos un grave peligro, pues este tipo de proceder elimina en la práctica la garantía fundamental de la presunción de inocencia.

De ese modo, nada importará si eres inocente de lo que se te acusa, pues de todos modos vas a ser humillado, se destruirá tu reputación y lo peor de todo, perderás tu libertad por un tiempo indeterminado.

En sistemas avanzados, como en Estados Unidos, por ejemplo, poco importa a los fiscales la percepción que la comunidad tenga sobre un individuo o el deseo que un gobernante o funcionario tenga de verlo tras las rejas. Todo lo que los fiscales analizan y toman en cuenta antes de formular cargos es si en efecto pueden probar su acusación. Por eso, la gran mayoría de los casos que llegan al conocimiento de los fiscales en Estados Unidos son rechazados por los mismos, aun cuando el fiscal considere en su fuero interno que el acusado es culpable.

Esa es una de las características de la democracia y del respeto al principio de presunción de inocencia, la cual nos molesta a todos enormemente y con toda razón cuando resulta en que alguien a quien percibimos como malo queda libre, pero que a su vez es la única garantía para que nadie pueda abusar el sistema y meter en la cárcel a un inocente.

No defiendo personas, defiendo la institucionalidad, la legalidad y las garantías de todos los ciudadanos, pues el respeto a esos conceptos básicos de la democracia es lo único que nos mantiene LIBRES.

QUE ESTÉN BIEN!!

EL ATAQUE ES A LA DEMOCRACIA, LA ESTABILIDAD Y EL DESARROLLO

Que cada uno piense y diga lo que quiera. Lo cierto es que el Órgano Ejecutivo ha utilizado todos los mecanismos posibles para tratar de convencer a los ciudadanos de que no está interfiriendo con la administración de justicia. Sin embargo, es justo que sepan que hay personas que no creemos en esos argumentos y para quienes cada comunicado de prensa y actuación de los funcionarios encargados de la defensa de la causa del Ejecutivo, lejos de convencernos, constituye un indicio adicional de culpabilidad. Creo que más allá de los detallitos novelezcos y especulativos del tema, lo que realmente está en discusión es:
  1. Democracia (separación de poderes)

  2. Estabilidad

  3. Desarrollo

Ya antes escribí sobre la ausencia de sustento jurídico del caso contra la Procuradora, así como los riesgos que las actuaciones del Procurador de la Administración (y ahora la Corte Suprema de Justicia) imponen sobre la totalidad de los servidores públicos del país y por lo tanto, sobre la salud institucional de la nación entera, por lo que sobre ello sólo diré que me ratifico de todo lo expresado aquí el 6 de enero recién pasado.


A quienes no opinan igual, les respeto, pero les pido que no descarten este análisis y que lo tomen en cuenta para futuras referencias, pues todos tenemos derecho a cambiar de parecer si las circunstancias y hechos varían.


La injerencia del Órgano Ejecutivo en temas de otros órganos del Estado pone en riesgo el sistema democrático de gobierno, el cual la gran mayoría de los panameños consideramos como el más adecuado y que además, de acuerdo con nuestra Constitución, es el fundamento jurídico de la República. Es decir, se encuentran en juego nuestras fundaciones, los pilares sobre los cuales se sostiene nuestro orden social. La esencia de la democracia es que el pueblo es el soberano para escoger a sus gobernantes, quienes sólo deben actuar para defender sus intereses. Como no hay garantías sobre el comportamiento humano, para asegurar que esos escogidos no den la espalda a los electores una vez se convierten en autoridades, el sistema funciona con poderes separados, de forma que NADIE pueda ostentar el poder total. No hay ser humano en la historia que haya sabido o podido manejar el poder absoluto. Quienes lo han ostentado siempre terminan cometiendo abusos, siendo su única víctima el pueblo. La mayor contradicción que ofrece esta realidad es que en muchas de esas ocasiones ha sido el propio pueblo el que consintió e inclusive alentó la concentración de poder, por considerar que con ello lograría justicia y prosperidad. No obstante, nuestra historia nos enseña que nunca algo bueno se originó de un abuso.


Pero lo que hace que estos hechos tengan una consecuencia práctica, es decir, que los conceptos de democracia y separación de poderes incidan de forma directa en nuestro diario vivir, es que una vez las reglas fundamentales del juego democrático son violadas se pierde de manera inmediata la ESTABILIDAD. La estabilidad es certeza, pero en un país en el que no se sabe cuándo ni en qué casos se aplica la ley, pues la misma se interpreta al margen de su propio texto y espíritu y sólo tomando en cuenta los intereses de quien detenta el poder, no puede existir certeza de nada. Entonces cada uno comienza a actuar sin consideración a reglas, entendiendo que las mismas ya no aplican y que los resultados dependerán de la fuerza y no de lo que sea justo o legal. Significa para ustedes algo la expresión LEY DEL REVÓLVER?, cuánto estamos retrocediendo?, cómo es posible que en el Panamá del siglo 21 estemos expuestos a la posibilidad de esta clase de retroceso?


Si continuamos en el curso actual la ausencia de reglas democráticas traerá inestabilidad y ésta a su vez resultará en una dramática disminución de la calidad de vida de todos los panameños. ¿ Alguien ha escuchado de alguna nación que haya logrado el desarrollo humano y material en ausencia de estabilidad política y social?, yo no y creo firmemente que eso no es posible.

Es por eso que para quienes creemos que el Órgano Ejecutivo sí se está inmiscuyendo en asuntos que corresponden a otros órganos del Estado, esta situación no tiene nombres ni apellidos ni se resuelve con interpretaciones "geniales" de la Constitución y las leyes, con "elocuentes" discursos de empleados estatales en programas de opinión o con comunicados de la oficina de prensa de la Presidencia. Para los ciudadanos que el gobierno no ha podido convencer estamos al borde de una crisis del sistema, la cual tiene el potencial de remover los cimientos de nuestra nación con consecuencias altamente perjudiciales para todos.

Todavía hay tiempo para recapacitar y retomar el camino democrático, evitando así el inicio de una serie de eventos sobre los cuales nadie tendrá control. Es cierto que en nuestro Panamá hay una enorme y muy justificada sed de justicia y me declaro colaborador de cualquiera que tenga como objetivo lograrla, pero esa justicia debe ser alcanzada dentro del orden y el imperio de la ley. De cualquier otra forma, el remedio será mucho peor que la enfermedad.

QUE ESTÉN BIEN!!

sábado, 23 de enero de 2010

DEL FIS NACERÁ EL NUEVO PANAMA

Tratemos de limpiar un poco la escena y quedémonos con lo realmente importante. Para esto, creo que lo mejor es hacer una listita de cosas que pueden provocar curiosidad, morbo o hasta diversión, pero que nos distraen del tema central:

  1. Quién ordenó la consultoría?
  2. Qué intenciones tenía esa consultoría?
  3. Cómo iban a ser utilizados realmente los resultados?
  4. Quién filtró la información a La Prensa?
  5. Por qué la filtró?
  6. Si estaba lista desde octubre, por qué ocultaron sus resultados?
  7. Quién es López Consultores?
  8. Qué relación tenía Tamburrelli con ellos?
  9. Es Tamburrelli héroe, villano o tonto útil?

Y podría agregar muchas interrogantes más, tan entretenidas como la mejor novela, pero que nos quitan tiempo precioso que necesitamos para avanzar.

Lo que sí importa es que producto de la información que ha hecho pública el diario La Prensa, independientemente de cuáles sean los intereses de cada uno o de cuáles fuesen sus intenciones originales, el único camino posible es una investigación por parte de la Contraloría General de la República. Muchos especulan, por razones de la relación de dependencia que tuvo la persona que regenta esa institución de fiscalización con el actual jefe del Ejecutivo, que esa investigación podría no ser objetiva y/o efectiva. Por el bien del país, espero que esa preocupación no se materialice y que todo se haga de acuerdo a lo que prescribe la ley y con la imparcialidad debida. También importa el hecho de que por primera vez tenemos un escandalo "objetivo y democrático", es decir, uno que involucra a TODOS los partidos y a muchas administraciones.

En beneficio de la transparencia pienso que tenemos una especie de garantía y la misma consiste en que el diario La prensa ya investigó todo el caso y tienen en su poder gran cantidad de información que no han publicado. Por lo tanto, si alguien trata de ocultar cosas en beneficio de personas en particular, creo que va a quedar al descubierto de manera inmediata e inequívoca. Después de todo, La Prensa ha puesto todo su prestigio en juego. Si sus aseveraciones (recordemos que ellos no sólo han informado sino que han calificado los hechos como fraude) resultan falsas no creo que vuelvan a tener la credibilidad de la que sin duda alguna gozan actualmente. Adicionalmente, si en efecto hay tantos involucrados como pareciera, en la medida que unos vayan "cayendo" no van a dejar que otros se salven y si fuese cierto que hay gente del gobierno con ganas de proteger a personas que presuntamente participaron en malos manejos, esas intenciones se desvanecerán rápidamente cuando comprueben que la movida los puede hundir junto con sus protegidos.

Pero lo medular es que pase lo que pase, sólo tomando en cuenta lo que ya se sabe, NADIE puede ni podrá argumentar que el sistema de clientelismo político es positivo y mucho menos que podemos continuar con el mismo. El FIS es sólo la materialización de una realidad que nos viene mermando nuestra capacidad de progreso por más de un siglo de vida republicana y eso es el clientelismo a su máxima expresión. Por eso digo que de este cataclismo político que se ha iniciado y que pienso que afortunadamente ya nadie puede controlar, nacerá el nuevo Panamá. Un Panamá en el que todos los votantes entendamos que no podemos centrar nuestras esperanzas en los candidatos que regalan tonterías con nuestro propio dinero, sino que debemos analizar y entender quiénes son los más capaces, los más inteligentes, los más honestos y sobre todo, los mejor intencionados.

Como siempre ocurre con lo verdaderamente bueno, no será fácil sacarle a esta situación todo lo positivo que tiene el potencial de darnos, pero la oportunidad está allí y el aprovecharla depende de nosotros.

QUE ESTÉN BIEN!!

martes, 19 de enero de 2010

PROPONGO UN PACTO NACIONAL

Ayer en el programa de radio La Platea (lunes y miércoles de 6:00 a 7:00 pm por los 94.5 FM-Radio Panamá) estábamos comentando sobre las terribles situaciones que aquejan a nuestros hermanos haitianos y además sobre el resultado de las elecciones presidenciales en Chile.

Mencioné que era interesante que aunque afortunadamente Panamá está mucho más cerca de la situación chilena que de la haitiana, actualmente nos encontrábamos en una posición intermedia que no era igual a la de ninguno de esos países. Adicionalmente dije que era trabajo de todos los panameños avanzar y llegar a ser el Chile de nuestra región y no permitir que la violencia y el deterioro de todas las relaciones sociales nos llevaran eventualmente a un estado de salvajismo como el que sufren millones de haitianos, producto del cual se hace difícil hasta darles la ayuda más elemental.

Para mi sorpresa y la de mis compañeros de programa, un asiduo oyente encontró en mis palabras no sé qué rasgos de política partidista y llamó para decir que todos los miembros del PRD debíamos estar avergonzados porque si Panamá se parecía a Haití era porque el PRD había gobernado por 30 años. Por unos segundos sentí el impulso de explicarme y adicionalmente de rebatir esa afirmación, sin embargo pronto entendí que eso no contribuiría en nada a lo que yo mismo había propuesto hacía menos de un minuto, es decir, avanzar evitando todo tipo de violencia y de deterioro de nuestras relaciones humanas.

Entonces me hice varias interrogantes, ¿cuánto tiempo y esfuerzo gastamos los panameños en debatir sobre el pasado?, ¿cuánta energía utilizamos en defender o atacar a Omar Torrijos o Arnulfo Arias?, ¿cuántas horas perdemos tratando de convencer a alguien de que la invasión fue mala o buena?. Todas estas preguntas tuvieron la misma respuesta: DEMASIADO y lo peor, sin ningún provecho, pues las visones de cada uno sobre estos temas no van a a cambiar por nada que otro haga. Eso me hizo pensar otra vez en Chile. Un país con tanto avance, pero en el que hoy, como ayer, existe una clara polarización en el tema Pinochet-Dictadura. ¿Cómo lo han logrado? si, al igual que nosotros, existen entre ellos profundas divisiones que no se van a sanjar.

Concluí que sólo hay una forma de llegar a donde han llegado los chilenos, dadas sus circunstancias y eso es, reconociendo los temas en los cuales nunca se van a poner de acuerdo, respetando esas diferencias y poniéndose de acuerdo en todo lo demás.

Esa es la base del trato que propongo a mis compatriotas y que se resume en acciones concretas:
  1. Reconzcamos que no nos vamos a poner de acuerdo sobre las figuras de Omar y Arnulfo o sobre la invasión o el 9 de enero o sobre lo que pasó antes de 1968, entre otras.
  2. Respetemos las opiniones y visiones de cada uno sobre esos acontecimientos.
  3. No perdamos el menor recurso en debatir sobre los temas incluidos en el punto 1.
  4. Pongámonos de acuerdo en todo lo demás, dándole forma de objetivos nacionales.
  5. No generalicemos para dividir el país entre buenos y malos. Reconozcamos que en cada partido político, gremio, religión o clase social hay tanto buena como mala gente y que al más malo se le puede sacar algo bueno.
Sólo controlo lo que yo voy a hacer de aquí en adelante y les aseguro que me esforzaré en cumplir con estos 5 puntitos, pero se los dejo a su consideración y agradezco sus comentarios a favor o en contra.

Dejemos a los muertos descansar y tomemos responsabilidad de nuestro futuro. Que haya diferencias, pero no sobre situaciones en las que la mayoría de nosotros no participó, no sobre objetivos, sino sobre métodos o vias para avanzar y alcanzar esas metas comunes que resultarán en un mejor futuro para nuestros hijos. Si los chilenos pudieron, nosotros también podemos.

QUE ESTÉN BIEN!!

martes, 12 de enero de 2010

CUIDADO CON LA DECEPCIÓN

Cuando un ser humano es decepcionado por primera vez todavía le queda en el sistema mucha capacidad para recuperarse y volver a creer. Lógicamente, si los desengaños continúan se va haciendo más difícil confiar. Lo realmente dañino es que en ese estado el hombre no es efectivo al tomar decisiones. La desconfianza nubla la razón y se puede llegar a escoger la peor opción.


Es por eso que los políticos de hoy deben tener como práctica consciente el evitar que los votantes caigan en ese estado que apaga la luz del entendimiento y abre las puertas a la irracionalidad. Lo vital para lograr ese noble propósito es no tratar de engañar a nadie. Y digo que ni siquiera tratar, porque ya la gran mayoría de las personas saben cuando las están tratando de engañar, ya sea con manifestaciones falsas o que "maquillen" la verdad y a veces ese intento es más dañino que el propio engaño.


El doble discurso y el uso de la retórica con propósitos de engaño son de las peores ofensas en contra de la credibilidad. Cuando un político dice que algo es malo si lo hace otro, pero trata de justificarlo si lo hace él, perjudica la capacidad de confiar de todos los ciudadanos. Así mismo, el político debe cuidar sus excusas y argumentos, por ejemplo, no debe llamar "error" una acción que se llevó a cabo a sabiendas de que era incorrecta, pues todo el mundo sabe que "error" lleva implícita la falta de malicia y el desconocimiento. Los políticos cometemos un grave ERROR si subestimamos la inteligencia de nuestros interlocutores.


Todas estas conductas llevan a los votantes a tomar decisiones sentimentales más que inteligentes en la próxima oportunidad de escoger a sus gobernantes. Esta es una secuencia de hechos idéntica que se ha dado y se sigue dando a lo largo y ancho del planeta y lamentablemente los resultados siempre han sido desastrosos. Ojalá todos los políticos seamos conscientes de que nuestra actuación de hoy afecta directamente el tipo de gobierno y de sociedad que nuestro país tendrá en el futuro inmediato.


QUE ESTÉN BIEN!!

sábado, 9 de enero de 2010

QUÉ PASÓ EL 9 DE ENERO?

Dependiendo de quién te lo cuente, unos soldados mataron a gente inocente, unos soldados mataron a unos comunistas, unos soldados mataron a un grupo de ladrones, unos soldados mataron a unos patriotas o nadie murió y todo es una farsa de la izquierda.

Lamentablemente, en Panamá hemos tenido mucho más vocación por profundizar en nuestras diferencias que por buscar ese denominador común que siempre existe y que nos puede hacer avanzar a pasos agigantados como sociedad. En el caso particular del 9 de enero de 1964, aunque yo no había nacido, los relatos de los que sí vivían y de los libros de historia me llevan a concluir que muchas cosas ocurrieron a la misma vez.

De seguro murieron personas inocentes, pues por lo menos algunos no portaban armas, muchos de ellos murieron defendiendo un ideal de soberanía de lo que consideraron una afrenta contra la dignidad nacional, de seguro otros quedaron atrapados en el fuego y realmente no murieron defendiendo nada, otros se aprovecharon de la situación y quisieron robar y también murieron y dentro de todo el grupo, con certeza había comunistas, izquierdistas y de muchas otras corrientes políticas. Todas las historias son ciertas, pero los panameños insistimos en defender cada uno la que más nos gusta y eso nos hace perder de vista lo realmente importante.

Esa actitud no nos deja formar nuestra identidad de nación, por eso no nos sentimos orgullosos de nosotros mismos y casi se puede decir que no tenemos héroes nacionales o modelos a seguir.

Para mi lo importante de esta fecha es que un grupo de PANAMEÑOS consideró que una decisión de los norteamericanos, que en esa época ocupaban la zona del canal, era lesiva a la dignidad de Panamá y tuvieron la actitud cívica de manifestarse en contra de ello. No me importa si esos panameños eran comunistas o no, tampoco me importa si la decisión de los norteamericanos era realmente una ofensa o no y mucho menos si desde el punto de vista de la razón valía la pena morir tratando de izar una bandera. Lo que sí me importa es que en 1964 había panameños con sentido de patria, con ideales y con valentía y que muchos de ellos murieron por ello. Podemos no estar de acuerdo en muchas cosas, pero creo que hay otras que son incontrovertibles y que nos unen.


Sólo hablo de esa parte de los muertos y heridos que luchaban por un ideal de soberanía, no del resto. Me duele la muerte de cualquier ser humano, pero sólo los que mueren por una causa son héroes. Ni siquiera tengo que estar de acuerdo con su causa, el solo hecho de estar dispuestos a darlo todo por ella los hace héroes de la misma.


Ojalá en adelante podamos separar el polvo de la paja y concentrarnos y darle valor a lo que importa, a lo que nos hace grandes, a lo que nos une. Quisiera que, por ejemplo, en el futuro se conmemoren oficialmente fechas tan importantes como esta, para que demos testimonio a las nuevas generaciones de que sí hubo y sigue habiendo panameños buenos, decentes, valientes, héroes dignos de imitar. Es triste que en los últimos 20 años todos los gobiernos se hayan limitado a prohibir que se toque música alegre en las emisoras y que se venda licor. Estas medidas son ridículas, pues todo lo que producen es gente frustrada que no entiende por qué no se puede "divertir" y que decide violar los vacíos decretos de prohibición. Muy preferible sería educar a todos sobre estos temas y que cada uno tome y oiga lo que le dé la gana. Mejor un panameño alegre pero con dignidad, orgullo e identidad que uno aburrido y vacío.


El 9 de enero de 1964 pasaron muchas cosas, buenas regulares y malas, pero lo significativo es que ese día produjo algunos héroes de la patria que con su sacrificio contribuyeron a que 36 años después, la potencia más grande del mundo nos devolviera lo que era nuestro.


QUE ESTÉN BIEN!!

miércoles, 6 de enero de 2010

EL ATAQUE NO ES CONTRA LA PROCURADORA

En mi ejercicio de casi tres años como Director de la Policía Nacional tuve importantes diferencias de criterio con la señora Procuradora General de la Nación. Lo dejo hasta allí para no entrar en detalles que no aportan nada a lo que quiero comunicar, pero menciono el hecho con la intención de quede claro que no soy "fanático" de Ana Matilde Gómez y que no tengo razón alguna para defenderla a título personal.

No pretendo entrar en las especulaciones de quién está detrás de las acciones que se han propuesto en contra de la Procuradora, pues eso sería especular. El hecho cierto es que el Procurador General de la Adminstración encargado ha solicitado a la Corte Suprema de Justicia algunas medidas que no sólo ponen en peligro el ejercicio efectivo de las atribuciones de todos los funcionarios del país, sino que demuestran un desconocimiento o una falta de apego y respeto a los principios que rigen la ciencia del Derecho.

A la Procuradora se le está procesando por haber conducido una investigación contra un fiscal a quien un particular acusó de pedirle una coima. El acusador autorizó a la Procuradora para que pincharan su teléfono, con el objetivo de que las autoridades pudiesen escuchar de primera mano las solicitudes indebidas del fiscal. Eso se hizo y además, de acuerdo con lo que reposa en el expediente, el fiscal fue sorprendido infraganti cuando recibía la coima. Posteriormente el fiscal, quien todavía tiene ese caso pendiente de audiencia, pidió a la Corte que declarase ilegal el "pinchazo". Hasta ese momento, las normas que regulaban las escuchas telefónicas nunca habían sido interpretadas por La Corte Suprema, por lo que lo único que hizo la Procuradora fue cumplir con su deber constitucional y legal, es decir, aplicar la norma como ella consideró que era correcto. Entonces la Corte, de manera posterior y a solicitud del Fiscal acusado de recibir coimas, le aclaró a la Procuradora que su interpretación no era la correcta. Hasta ese momento todo se manejó de forma regular y apropiada.

Lo inverosímil y antijurídico es que la Procuraduría de la Administración haya tomado el citado fallo de la Corte como base para iniciar un proceso penal contra la Procuradora General de la Nación, pues en ese fallo no se habla de dolo, por el contrario, lo único que hacen los Magistrados es comunicarle a la Procuradora que se equivocó.

Este es el punto central de mi preocupación, pues si el exabrupto de la Procuraduría de la Administración se acepta como correcto, todos los funcionarios del país estarán en riesgo de cárcel por sólo cometer equivocaciones normales y propias del ejercicio de cualquier actividad.

Lo positivo para el país es que yo no he escuchado a nadie defender, desde el punto de vista jurídico, la actuación de la Procuraduría de la Administración, sin embargo, hay quienes han sugerido que aunque ese caso no tenga sustento de todos modos se debe sacar a la Procuradora, pues ella ha cometido otros errores o conductas que sí lo ameritan. A esas personas les pido que tengan cuidado, pues pueden estar labrando una suerte igual para ellos mismos en el futuro.

Como dije antes, tengo muchas diferencias de criterio con la señora Ana Matilde Gómez, inclusive concuerdo con algunas opiniones negativas con respecto a su desempeño, pero no por ello puedo consentir que se violen sus derechos y mucho menos representando ella en este momento a una institución tan vital para el país. Si alguien tiene otra acusación que amerite su separación, que la presente y que se le den a ella todas las garantías del debido proceso para defenderse.

El fin nunca justifica los medios, por lo que una "justicia" obtenida mediante la violación de la ley no es justicia y por tanto no trae la paz que la verdadera justicia conlleva.

EL ATAQUE ES CONTRA LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA, EL DERECHO Y EL ESTADO DEMOCRÁTICO.

QUE ESTÉN BIEN!!

martes, 5 de enero de 2010

INJERENCIAS PELIGROSAS

No sólo es dañina la injerencia de un órgano del Estado en las labores de otro, también existen en el Estado de Derecho otros factores de poder, como los medios de comunicación, que deben respetar la independencia de cada uno de esos órganos.

Me es extremadamente difícil utilizar nombres propios en este blog, pues ello podría (digamos que en la mayoría de los casos) afectar mi intención de no personalizar los temas. Sin embargo, en el caso que me ocupa hoy, lamentablemente no me queda otra opción, pues si generalizo estaría afectando a otros.

Creo profundamente en la libertad de expresión y en el papel de los medios de comunicación social de informar a la ciudadanía sobre todos aquéllos aspectos importantes de la vida nacional e internacional, en especial de los que algunos prefieren ocultar. Sin embargo, hasta ese importante cometido debe cumplirse siguiendo reglas de conducta y respetando las normas y principios del Estado de Derecho.

Lamentablemente, en el día de ayer el Diario La Prensa expresó en su espacio "hoy por hoy" unas pocas pero contundentes palabras que constituyen una injerencia directa e indebida sobre el Órgano Judicial y el Ministerio Público, lo que debe denunciarse pues nos pone a todos los ciudadanos en un potencial riesgo de ser juzgados fuera del sistema judicial, es decir, fuera de las reglas del Estado de Derecho.

El citado espacio inicia informando sobre la condena a 25 años de prisión dictada por el máximo tribunal de justicia peruano contra el ex presidente Alberto Fujimori y también menciona la condena al ex presidente tico Rafael Calderón. Luego relata cómo en Panamá hay un ex presidente y varios ex ministros investigados por la presunta comisión de delitos durante su ejercicio del poder. Hasta aquí no existe nada precaminoso, por el contrario, se habla de hechos objetivos y comprobables y se acepta que las citadas condenas fueron dictadas por tribunales. Sin embargo, tras el pedido razonable y positivo de que en esos casos los jueces y fiscales panameños actúen en apego a la ley, pasan a "exigir" que se acabe la época de la impunidad. Esa pequeña frase, vista en el contexto del escrito, no es más que una comunicación a jueces como a fiscales de que están obligados a condenar a los acusados. Para rematar, el escrito termina sentenciando que si esos funcionarios se atienen a la ley, llamada por el escritor específicamente "legalismos", no habrán cumplido su reto con hidalguía y habrán actuado ocultos en las sombras. Es decir, los jueces y los fiscales serán buenos en la medida en que consigan condenas, inclusive pasando por encima de la ley.

Si este fuese un pronunciamiento aislado, podríamos pensar en una equivocación, pero lamentablemente hemos visto cómo de manera sistemática este medio en particular se ha convertido en juez inquisidor, papel que no le corresponde en una verdadera democracia.

No defiendo a ninguna de las personas acusadas, de hecho, inclusive he criticado a la dirigencia de mi propio partido por realizar una defensa a ultranza de esos casos siendo imposible que tengan certeza de la inocencia de los copartidarios involucrados. Estoy plenamente de acuerdo con que cualquiera, haya ejercido la posición que sea, pueda ser indagado e investigado. Pero defiendo el principio de que a toda persona que se acuse se le respete el debido proceso y se le permita ser juzgada en derecho.

Lo que este diario viene haciendo son juicios y condenas fuera del sistema legal, sin reglas y sin posibilidad de defensa para los acusados y eso nos pone en riesgo a todos, independientemente del partido o gremio al que pertenezcamos.

Si permitimos abusos contra otro, estamos abriendo la puerta para abusos contra nosotros mismos. Como ya he mencionado anteriormente, la historia humana está llena de ejemplos en los que se ha permitido o aplaudido la violación de la ley escrita con la justificación de que ello resultará en la consecución de la justicia. Lamnetablemente, en todos los casos, sin excepción, el balance ha sido abrumadoramente negativo, pues eventualmente y siempre más temprano que tarde, aquéllos a quienes se les concedió "la licencia" empiezan a abusar de ella. El fin nunca justifica los medios.

QUE ESTÉN BIEN!!

lunes, 4 de enero de 2010

DE AGENDAS Y SOLUCIONES

Bienvenidos de vuelta al día a día estimados "blogeros". Vivimos en un mundo y en particular en una sociedad áltamente concentrada en lo que los noticieros llaman "la última hora". La tecnología al servicio de las comunicaciones permite que todo se sepa en "tiempo real", lo cual es positivo, pero si no controlamos nuestro apetito por "la última" ello también conlleva potenciales peligros.

En el afán por saber lo nuevo a veces olvidamos que hay temas que requieren de análisis profundo, que hay que llevar más alla de las superficialidades características de las portadas o de los titulares. Así mismo, podemos olvidar que no existe la noticia pura y que cada una de ellas se origina en algun tipo de interés, ya sea comercial, político, económico o de cualquier otra índole.

Como ejemplo, los acontecimientos judiciales que se dieron justo antes de las fiestas de fin de año opacaron por completo una discusión que estaba iniciando y que debió continuar para el bien de nuestra sociedad, con respecto a la escogencia de Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, quienes casualmente hoy tomaron posesión.

No pretendo juzgar las acciones del Presidente de la República, pero es un hecho objetivo que casi nadie en nuestro país está de acuerdo con el método actual de escogencia ni con sus resultados. Es responsabilidad de todos no dejar que un tema como este muera al ser eclipsado por "la última", pues el resolver el fondo de este tipo de problema es lo único que nos hará avanzar como sociedad.

Lo peor es que ni los partidos políticos ni los grupos de interés se han preocupado por proponer nada. Creo que ya debían existir varios anteproyectos de reforma al sistema de escogencia de Magistrados y los mismos tendrían que estar en manos del Ejecutivo. Sin embargo, tanto los partidos como los grupos de interés han gastado su tiempo y recursos en atacar y criticar a personas en particular, lo cual puede servir de desahogo para algunos, pero no nos saca del problema.

Por favor, no me interpreten erróneamente. Comparto muchas de las preocupaciones manifestadas en relación a los elegidos, sobre todo el hecho de que ninguno parece contar con la independencia necesaria con respecto al Ejecutivo, sin embargo, estar preocupados y manifestarlo no ayuda, hay que concentrarse en PROPONER y en que no nos impongan LA AGENDA.

QUE ESTÉN BIEN!!